Así se acaba el primer trimestre en Union

A las siete de la mañana habíamos quedado de juntarnos en Sorum House: Ondrej, Pavel, Peter, Darcia y yo. Todos hibamos a Nueva York, pero por distintos motivos. Darcia tomaba el avión que la llevaría a Europa; Pavel iba a conocer Nueva York; Peter acompañaría a Pavel, aunque esta sería su segunda vez en en la gran manzana; Ondrej se juntaría con un amigo que le pasaría las llaves de su departamento, gracias a locual pasará unos días con su novia allí y yo visité a mi primo y su familia. Como suele ocurrir, nos perdimos en la ciudadasique elcomienzo fuemedio caótico, pero pasado el impaz logré juntarmecon Cristian e Hilda (mi primo y su esposa) en Pen station. Fuimos a su casa donde estaba el Fede (el hijo de mi primo), aquien obviamente no hubiera reconocido si lo hubiera visto en la calle, porque la última vez que lo vi era un niño ahora es una dolescente. Cristian y la Hilda están igual. Al rato llegó Camila, la hija de Hilda, con su novio. Vimos el primer tiempo del partido de Chile y de ahí salimos a comer. Tras la comida volvimos a casa y conversamos tomandonos un café hasta que dieron las 7 me fueron a dejar donde había quedado de juntarme con los checos para volver a Schenectady. Todo fue tan natural; aunque hubieran pasado años sin vernos, se sintió como estar en familia.

En el viaje de vuelta nos pararon los carabineros para control de rigor y experimentamos lo extrictos que son acá, aunque no nos trataron mal ni nada. En una a Ondrej se le ocurrió bajarse del auto a revizar algo mientras los pacos revizaban la validades delsodocumetnos oalgoasíy dijeron por alta voz: "stay in the car" y luego nos dieron unos consejos considerando que somos estrangeros. El resto del viaje transcurrió tranquilo, sólo destacando los venados que vimos a la orilla de la carretera y las vueltas que nos dimos para llegar desde Albany a Schenectady. El problema de estar en un auto con puros checos es que cuando se pierden comienzan a hablar en checo y no entiendes nada.

Llegamos sanos y salvos a casa a eso de la 1 de la mañana. La noche anterior solo dormí 4 horas porque estuve hueviando con los chicos de las casa como hasta las 2, asique me fui a la cama como a la 1 y media, igual estaba cansada.

Hoy viajo a Chile, Pavel me va a llevar al aeropuerto. Las maletas están listas e iré a almorzar ahora con Mano. Espero encontrarme con algunas personasde las que quiciera despedirme, como Sophie y Camila, osino las llamaré a la vuelta, antes de partir al aeropuerto. Y así termina esta primera etapa de mi estadía en Union. Pasó rápido el tiempo y es raro dejar un hogar para ir a otro y luego volver a este. Primera vez que tengo dos hogares.